Este blog esta dedicado a difundir oraciones y devociones católicas, Para que todos los cristianos las conozcan y las hagan conocer. Este Blog NO ES OFICIAL, solo es un trabajo personal
Salvador misericordioso, consciente de que soy nada ante tu majestad, me postro a tus pies y te agradezco las innumerables pruebas de la gracia que te has dignado derramar sobre tan ingrata criatura. En especial te doy gracias por haberme liberado por tu sangre preciosa del poder destructivo de Satanás. En presencia de mi querida madre María, mi ángel guardián, mi santo patrono y de todas las huestes celestiales, me consagro voluntariamente y de todo corazón, Oh, querido Jesús, a tu sangre preciosa con la que redimiste el mundo del pecado, de la muerte y del infierno. Te prometo, con la ayuda de tu gracia y con todas mis fuerzas, suscitar y promover la devoción de tu sangre preciosa que es el precio de nuestra redención, para que tu adorable sangre sea honrada y glorificada por todos. De esta forma quiero reparar mi deslealtad a tu sangre preciosa de amor y a ser satisfacción por las muchas profanaciones que los hombres cometen contra el inestimable precio de su salvación. Que mis propios pecados, mi frialdad y todos los actos y respetuosos que haya cometido en el pasado contra ti, oh, sangre Santa y preciosa, queden borrados. Mira, oh, querido Jesús, te ofrezco el amor, el honor y la adoración de tu santísima madre, tus fieles discípulos y todos los santos han ofrecido a tu sangre preciosa. Te pido olvidar mi anterior falta de fe y frialdad y te pido que perdones a todos los que te hayan ofendido. Báñame oh, divino Salvador, y a todos los hombres, con tu sangre preciosa para que podamos, oh, amor crucificado, amarte de ahora en adelante con todo nuestro corazón y que honremos dignamente el precio de nuestra salvación. Amén
Bajo tu Amparo nos acogemos, oh, santa madre de Dios. No desprecies nuestras súplicas que te dirigimos a nuestras necesidades; antes bien, líbranos siempre de todos los peligros, oh, virgen gloriosa y bendita. Amén
Señor Jesucristo, a través de la historia, Tú nos conduces de regreso al Padre Todopoderoso. Te damos gracias y apreciamos Tu amor. Recordamos, con dolor en el corazón, nuestra debilidad, nuestros pecados, y todo Tu sufrimiento en esta noble tarea. Cómo aminorar Tu sufrimiento? Ayúdanos a hacerlo, te lo pedimos. Haremos lo que sea necesario, si Tú así lo quieres. Muéstranos Tu amor si esa es Tu voluntad.
Hacemos esta oración, en el nombre de Nuestro Señor Jesucristo, que vive y reina con el Padre, en unidad del Espíritu Santo, un solo Dios, por los siglos de los siglos. Amén.
Padre Eterno, te ofrezco todas las Heridas de Tu amadísimo Hijo Jesucristo, los dolores y agonías de Su Sacratísimo Corazón, y Su Preciosísima Sangre que brotó de todas Sus Heridas, en reparación por mis pecados y los pecados del mundo entero. Amén (3 veces)
CREDO
Creo en Dios, Padre todopoderoso, Creador del cielo y de la tierra. Creo en Jesucristo, su único Hijo, Nuestro Señor, que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo, nació de Santa María Virgen, padeció bajo el poder de Poncio Pilato, fue crucificado, muerto, y sepultado, descendió a los infiernos, al tercer día resucitó de entre los muertos, subió a los cielos y está sentado a la derecha de Dios, Padre todopoderoso. Desde allí ha de venir a juzgar a vivos y a muertos.
Creo en el Espíritu Santo, en la santa Iglesia Católica, la comunión de los santos, el perdón de los pecados, la resurrección de la carne y la vida eterna. Amén.
PRIMER LLAMADO ANGUSTIOSO
"¿Dónde estás hijo Mío? Tu Señor te busca... ¡Ven a Mí!... ¡Ven, acércate más, y escucha Mi angustioso llamado!
Hijo Mío... había una vez un Hombre que tenía muchas ovejas, las cuidaba y pastoreaba bien. Cuando tenían sed, las conducía a un manantial de agua fresca, para que pudieran satisfacer su sed. No permitía que pasaran hambre. Las llevaba a verdes praderas. Ellas comían y engordaban y se fortalecían. El Hombre fortificó la tierra donde pastaban, para que ningún lobo entrara y dañara el rebaño.
Un día, las ovejas planearon una rebelión, y a la fuerza escaparon del campo y se adentraron en el bosque. Allí, fueron capturadas por animales salvajes. Eran como esclavas sin esperanza. Sus cuerpos y sangre eran utilizados para festivales y sacrificios de animales a sus dioses.
A pesar de todo esto, el Hombre no se olvidó de su rebaño. Envió a sus sirvientes, y a todos los mataron. Por último, envió a Su Hijo, quien al fin ganó la batalla.
El Hijo del Hombre, condujo al rebaño, día y noche a través del desierto. En este caminar, surgieron muchas dificultades, que no podían soportar. Se quejaron al Hijo del Hombre, profirieron toda clase de palabras crueles contra Él, y finalmente lo mataron.
Hijo... ¿Qué piensas que hará el Padre del Hijo del Hombre cuando se entere de la muerte de Su Hijo?
Hijo... ustedes son el rebaño. Mi Padre es el dueño del rebaño, quien envió muchos profetas a Su pueblo, que vivió en un desierto terrible.
Yo soy el Hijo, a quien ustedes persiguieron y mataron. ¿Qué les he hecho? A pesar de todos vuestros pecados. Mi Padre aún los está llamando para que regresen a Él. Pero ustedes no prestan atención a Su llamado.
¡REGRESEN! ¡OH ISRAEL, PUEBLO MÍO!
Hagan reparación por sus pecados y los pecados que el mundo entero comete contra Mí Padre y contra Mi Preciosa Sangre.
¡YO SOY EL AGONIZANTE JESUCRISTO!
(Silencio)
Oración
Dios mío. Dios mío... yo creo firmemente con todo mi corazón... espero y confío sinceramente en Ti. Solamente a Ti adoraré por siempre. Con verdadero arrepentimiento y amor, me postro a Tus Pies; te pido perdón por aquellos que no creen y no quieren creer, por aquellos que no Te adoran y no quieren adorarte y por aquellos que Te crucificaron y Te están crucificando diariamente. Querido Jesús, yo te consolaré durante toda mi vida. Amén.
Acto de contrición
Oh mi Dios, yo me arrepiento de todo corazón por haber pecado contra Ti, por ser Tú tan bueno. Con la ayuda de Tu gracia, no pecaré nuevamente. Amén
Padrenuestro... Avemaría... (3 veces) Gloria...
Señor nuestro Jesucristo agonizante. Tú sufriste y pagaste por nosotros... Que se haga Tu voluntad en la tierra.
Aplaca el fuego de Tu cólera, oh Señor... perdón porque hemos pecado... No pecaremos nunca más.
Oh Santísima Trinidad, Padre, Hijo y Espíritu Santo. Te ofrezco la Palabra hecha carne, Jesucristo, su carne cubierta de Heridas y Sangre, su agonía en el huerto, su flagelación, su coronación de espinas, el repudio que sufrió, su condena, su crucifixión y muerte, en unión con todos los sufrimientos de Tu Santa Iglesia y la sangre de los mártires, en reparación por mis pecados y los pecados del mundo entero. Amén
ORACIÓN AGONIZANTE
Jesús Agonizante, yo te ofrezco mi corazón para unirlo a Tu Corazón Agonizante y compartir Tu agonía. Jesús, yo deseo permanecer en agonía Contigo, a fin de apresurar Tu glorioso Reino de Paz. Amén
SEGUNDO LLAMADO ANGUSTIOSO
"Hijo Mío, acércate a Mí, escucha Mi angustioso llamado. Por amor a ti, ofrezco Mi Cuerpo como sacrificio vivo, pan de vida para todos los hombres. Mi Sangre, preciosa bebida, bebida de los Ángeles del cielo, entregada con amor a los hombres.
Hijo Mío... permanezco por ti en el Sacramento del Amor... esperando pacientemente por ti en el Sagrario, donde estoy prisionero por ti. Tú, raras veces te acercas a Mí, porque no te acuerdas de Mí, que estoy prisionero por ti.
Hijo mío... Mi agonía es grande cuando veo la frialdad, la indiferencia y la negligencia con que te acercas a la Santa Trinidad, cuya Presencia llena el Santuario Santo. Yo estoy aquí, hijo mío... Yo estoy aquí en plenitud. Teme la Presencia de tu Dios. Acércate con respeto y reverencia.
Hijo mío... ¿sabes tú lo que sufro cuando entro en el santuario de tu corazón a través de la Sagrada Comunión? Tus pecados me amarran y me flagelan sin misericordia. En tu corazón no hay nadie que Me consuele. Luego de haberme flagelado insensiblemente, Me arrastras fuera, y cierras con llave la puerta de tu corazón con iniquidad. Esto es lo que Me haces con tu vida de pecado.
Yo soy el Pan de Vida para todos los hombres que me reciben en estado de santidad. Vengo a darles vida, no muerte. Limpia las iniquidades de tu corazón. Ábreme la puerta de tu corazón. Haz de tu corazón un tabernáculo de consuelo para Mí.
Hijo... que Yo viva en tu santuario de una Comunión a la otra. ¡Acógeme, hazme sentir bienvenido!
Hijo mío... todos los que Me acogen, acogen a Mi Padre y al Espíritu Santo que viven en Mi. Todos los que Me rechazan, rechazan a la Santísima Trinidad. Hijo... aún cuando otros Me rechacen, haz de tu corazón un tabernáculo de consuelo para Mí.
Yo soy Jesucristo Agonizante, llamándote para que REGRESES."
(Silencio)
Oración
Dios mío. Dios mío... yo creo firmemente con todo mi corazón... espero y confío sinceramente en Ti. Solamente a Ti adoraré por siempre. Con verdadero arrepentimiento y amor, me postro a Tus Pies; te pido perdón por aquellos que no creen y no quieren creer, por aquellos que no Te adoran y no quieren adorarte y por aquellos que Te crucificaron y Te están crucificando diariamente. Querido Jesús, yo te consolaré durante toda mi vida. Amén.
Acto de Contrición
Oh mi Dios, yo me arrepiento de todo corazón por haber pecado contra Ti, por ser Tú tan bueno. Con la ayuda de Tu gracia, no pecaré nuevamente. Amén
Padrenuestro...Avemaría...
(3 veces) Gloria...
Señor nuestro Jesucristo agonizante. Tú sufriste y pagaste por nosotros... Que se haga Tu voluntad en la tierra.
Aplaca el fuego de Tu cólera, oh Señor... perdón porque hemos pecado... No pecaremos nunca más.
Jesús Sacramentado perdónanos, te rogamos, oh Señor.
ORACIÓN A LA SANTÍSIMA TRINIDAD
Oh Santísima Trinidad, Padre, Hijo y Espíritu Santo. Te ofrezco la Palabra hecha carne, Jesucristo, su carne cubierta de Heridas y Sangre, su agonía en el huerto, su flagelación, su coronación de espinas, el repudio que sufrió, su condena, su crucifixión y muerte, en unión con todos los sufrimientos de Tu Santa Iglesia y la sangre de los mártires, en reparación por mis pecados y los pecados del mundo entero. Amén
ORACIÓN AGONIZANTE
Jesús Agonizante, yo te ofrezco mi corazón para unirlo a Tu Corazón Agonizante y compartir Tu agonía. Jesús, yo deseo permanecer en agonía Contigo, a fin de apresurar Tu glorioso Reino de Paz. Amén
TERCER LLAMADO ANGUSTIOSO
"Hijo Mío... Yo estoy en tu corazón, un Getsemaní solitario, donde estoy velando, y nadie viene a velar Conmigo ni siquiera por una hora. Tu prefieres ir tras la posesión de bienes terrenos, aún a riesgo de tu perdición, dejándome sufrir solo.
El enemigo se aproxima rápidamente... está ganando terreno a fin de ganar muchas almas, mientras tú duermes. Hijo, ¿no puedes levantarle y velar Conmigo siquiera una hora? Yo estoy en el santuario de tu alma, un Getsemaní solitario, esperando que vengas.
Muchas almas, muchas almas van al infierno a causa de los pecados de la carne. Hijo, mira como tú conduces muchas almas a la perdición a través de tu forma de vestir. Yo soy aquel a quien tú expones desnudo públicamente. Hijo... consuélame. Hijo, ten misericordia de Mí.
¡Nunca debe un hombre imitar a una mujer! ¡Nunca debe una mujer imitar a un hombre! Sé tal como Yo te hice, hijo; sé tal como Yo te hice. Te digo, aléjate de esta moda mundana. Ese es el plan del enemigo: destruir el templo del Espíritu Santo que es tu cuerpo. Vive una vida modesta.
Mi hijo amado, porque te amo y deseo que me muestres amor, te suplico me ofrezcas todo tu ser, que lo guardes para Mí y solamente para Mí. Que él me glorifique siempre, que me consuele siempre. No hago este llamado al mundo, sino a tí a quien amo. Ofrécemelo... ofrécelo para salvación.
Yo soy Jesucristo Agonizante, llamándote para que REGRESES!"
(Silencio)
Oracion
Dios mío. Dios mío... yo creo firmemente con todo mi corazón... espero y confío sinceramente en Ti. Solamente a Ti adoraré por siempre. Con verdadero arrepentimiento y amor, me postro a Tus Pies; te pido perdón por aquellos que no creen y no quieren creer, por aquellos que no Te adoran y no quieren adorarte y por aquellos que Te crucificaron y Te están crucificando diariamente. Querido Jesús, yo te consolaré durante toda mi vida. Amén.
Acto de Contrición
Oh mi Dios, yo me arrepiento de todo corazón por haber pecado contra Ti, por ser Tú tan bueno. Con la ayuda de Tu gracia, no pecaré nuevamente. Amén
Padrenuestro...Avemaría...
Gloria (tres veces)
Señor nuestro Jesucristo agonizante. Tú sufriste y pagaste por nosotros... Que se haga Tu voluntad en la tierra.
Aplaca el fuego de Tu cólera, oh Señor... perdón porque hemos pecado... No pecaremos nunca más.
Jesús Sacramentado perdónanos, te rogamos, oh Señor.
ORACIÓN A LA SANTÍSIMA TRINIDAD
Oh Santísima Trinidad, Padre, Hijo y Espíritu Santo. Te ofrezco la Palabra hecha carne, Jesucristo, su carne cubierta de Heridas y Sangre, su agonía en el huerto, su flagelación, su coronación de espinas, el repudio que sufrió, su condena, su crucifixión y muerte, en unión con todos los sufrimientos de Tu Santa Iglesia y la sangre de los mártires, en reparación por mis pecados y los pecados del mundo entero. Amén
ORACIÓN AGONIZANTE
Jesús Agonizante, yo te ofrezco mi corazón para unirlo a Tu Corazón Agonizante y compartir Tu agonía. Jesús, yo deseo permanecer en agonía Contigo, a fin de apresurar Tu glorioso Reino de Paz. Amén
CUARTO LLAMADO ANGUSTIOSO
"Hijo Mío... ¿es así como traicionas a tu Señor y Salvador? Solamente por el dinero mundano y perecedero, escogiste traicionar a tu Señor, y entregarme a esos hombres crueles para que Me crucificaran. Hijo, te estás convirtiendo en el Judas de este último tiempo. ¡Cuán terrible será todo para aquellos que traicionan al Hijo del Hombre, y lo entregan a hombres pecadores para ser crucificado! Mira cuan lamentablemente van a la eternidad a sufrir por siempre.
Aún entre los sacerdotes de Mi Corazón, hay muchos Judas que prefieren los bienes terrenales a cambio de su Señor, quien está en agonía. Esto me causa mucho dolor, hijo Mío, porque están haciendo de la casa de Mi Padre un mercado. Mi Padre está grandemente molesto. Miren bien, cómo ustedes me están sacando de Mi Santo templo. Hijo, ¿deseas la presencia de tu Dios? Ofréceme tu vida.
Yo soy Aquel a quien ustedes están traicionando solamente por cosas terrenales. Hijo... ya que todas esas cosas por las que estás trabajando serán destruidas por el fuego... ¿por qué estás trabajando en vano?
Regresa a Mí, hijo Mío... ten misericordia de Quien vino a salvarte.
Que Mis sacerdotes regresen a Mí. Yo soy Jesucristo Agonizante quien los ama, llamándoles para que REGRESEN!"
(Silencio)
Oración
Dios mío. Dios mío... yo creo firmemente con todo mi corazón... espero y confío sinceramente en Ti. Solamente a Ti adoraré por siempre. Con verdadero arrepentimiento y amor, me postro a Tus Pies; te pido perdón por aquellos que no creen y no quieren creer, por aquellos que no Te adoran y no quieren adorarte y por aquellos que Te crucificaron y Te están crucificando diariamente. Querido Jesús, yo te consolaré durante toda mi vida. Amén.
Acto de Contrición
Oh mi Dios, yo me arrepiento de todo corazón por haber pecado contra Ti, por ser Tú tan bueno. Con la ayuda de Tu gracia, no pecaré nuevamente. Amén
Padrenuestro...Avemaría... Gloria...(tres veces)
Señor nuestro Jesucristo agonizante. Tú sufriste y pagaste por nosotros... Que se haga Tu voluntad en la tierra.
Aplaca el fuego de Tu cólera, oh Señor... perdón porque hemos pecado... No pecaremos nunca más.
Jesús Sacramentado perdónanos, te rogamos, oh Señor.
ORACIÓN A LA SANTÍSIMA TRINIDAD
Oh Santísima Trinidad, Padre, Hijo y Espíritu Santo. Te ofrezco la Palabra hecha carne, Jesucristo, su carne cubierta de Heridas y Sangre, su agonía en el huerto, su flagelación, su coronación de espinas, el repudio que sufrió, su condena, su crucifixión y muerte, en unión con todos los sufrimientos de Tu Santa Iglesia y la sangre de los mártires, en reparación por mis pecados y los pecados del mundo entero. Amén
ORACIÓN AGONIZANTE
Jesús Agonizante, yo te ofrezco mi corazón para unirlo a Tu Corazón Agonizante y compartir Tu agonía. Jesús, yo deseo permanecer en agonía Contigo, a fin de apresurar Tu glorioso Reino de Paz. Amén.
QUINTO LLAMADO ANGUSTIOSO
"Hijo Mío... ¿Cuándo terminaran los tormentos de Mi flagelación, causados por tus pecados y los del mundo? ¿Por qué Me están flagelando, y al mismo tiempo coronándome de espinas? Y diciendo: "DÉJENME PECAR... YA IRÉ DESPUÉS A CONFESARME".Yo soy el Agonizante Jesús, a Quien tú constantemente torturas.Hijo... ¿ACASO TE DI EL SACRAMENTO DE LA PENITENCIA, PARA QUE TE CONVIRTIERAS EN UN POZO DE INIQUIDAD?
Ese es el Sacramento de Mi Amor. El abre el océano de la misericordia divina. Mi Sangre y Agua Preciosas, que brotaron para salvar y lavar tu iniquidad, para que vayas y no peques más.
Hijo... retira la corona de espinas... ten misericordia de Mí, no Me flageles más. Ama a tu Dios, tu Creador. No te hagas falsos dioses de ninguna criatura. Sólo a tu Dios temerás y adorarás. No pronuncies el nombre de tu Dios en vano.
Hijo... recuerda guardar el día obligatorio, santo. Haz respetar Mi Nombre en este mundo corrupto. Haz todas estas cosas, para aminorar los dolores de Mi agonía. Ofrece todos tus desengaños, pruebas y persecuciones en reparación por tus pecados, y los del mundo entero.
Yo soy el Agonizante Jesucristo, llamándote para que REGRESES".
(Silencio)Oración Dios mío. Dios mío... yo creo firmemente con todo mi corazón... espero y confío sinceramente en Ti. Solamente a Ti adoraré por siempre. Con verdadero arrepentimiento y amor, me postro a Tus Pies; te pido perdón por aquellos que no creen y no quieren creer, por aquellos que no Te adoran y no quieren adorarte y por aquellos que Te crucificaron y Te están crucificando diariamente. Querido Jesús, yo te consolaré durante toda mi vida. Amén.Acto de ContriciónOh mi Dios, yo me arrepiento de todo corazón por haber pecado contra Ti, por ser Tú tan bueno. Con la ayuda de Tu gracia, no pecaré nuevamente. Amén
Padrenuestro (1) -Avemaría (1) - Gloria (tres veces)
Señor nuestro Jesucristo agonizante. Tú sufriste y pagaste por nosotros... Que se haga Tu voluntad en la tierra.
Aplaca el fuego de Tu cólera, oh Señor... perdón porque hemos pecado... No pecaremos nunca más.Jesús Sacramentado perdónanos, te rogamos, oh Señor.ORACIÓN A LA SANTÍSIMA TRINIDADOh Santísima Trinidad, Padre, Hijo y Espíritu Santo. Te ofrezco la Palabra hecha carne, Jesucristo, su carne cubierta de Heridas y Sangre, su agonía en el huerto, su flagelación, su coronación de espinas, el repudio que sufrió, su condena, su crucifixión y muerte, en unión con todos los sufrimientos de Tu Santa Iglesia y la sangre de los mártires, en reparación por mis pecados y los pecados del mundo entero. AménORACIÓN AGONIZANTEJesús Agonizante, yo te ofrezco mi corazón para unirlo a Tu Corazón Agonizante y compartir Tu agonía. Jesús, yo deseo permanecer en agonía Contigo, a fin de apresurar Tu glorioso Reino de Paz. Amén.
SEXTO LLAMADO ANGUSTIOSO
"Hijo Mío... acércate a Mí, y escucha Mi angustioso llamado. Diariamente ando buscando quien Me consuele, y no encuentro a nadie. Mira Mi rostro agonizante. ¿Dónde está la Verónica de estos tiempos? ¿Dónde esta para que Me limpie el rostro y Me consuele? ¿Acaso se ha unido a la multitud gritando: crucifícalo, crucifícalo?
Se han olvidado que Yo soy su Mesías, que los sacó de Egipto, que los alimentó con el maná celestial, y los acogió bajo Sus alas en seco y ardiente desierto.
Me has rechazado y ya no hay nadie que me ayude. Hijo... así es como tú abandonas tu cruz, y te alejas del camino del Calvario, dejándome sufrir solo.
En verdad te digo, hijo Mío... NO HAY OTRO CAMINO QUE TE CONDUZCA A LA TIERRA PROMETIDA, QUE EL CAMINO DE LA SANTA CRUZ. CARGA CON TU CRUZ Y SÍGUEME TODOS LOS DÍAS DE TU VIDA.
Ayúdame a cargar todas estas cruces que han sido rechazadas, que Mi pueblo ha abandonado para que Yo las lleve. HIJO... VIVE TU VIDA DE CONSAGRACIÓN. Carga tu cruz, y sígueme.
Yo soy Jesucristo Agonizante, que te llamo para que REGRESES."
(Silencio)
Oración
Dios mío. Dios mío... yo creo firmemente con todo mi corazón... espero y confío sinceramente en Ti. Solamente a Ti adoraré por siempre. Con verdadero arrepentimiento y amor, me postro a Tus Pies; te pido perdón por aquellos que no creen y no quieren creer, por aquellos que no Te adoran y no quieren adorarte y por aquellos que Te crucificaron y Te están crucificando diariamente. Querido Jesús, yo te consolaré durante toda mi vida. Amén.
Acto de Contrición
Oh mi Dios, yo me arrepiento de todo corazón por haber pecado contra Ti, por ser Tú tan bueno. Con la ayuda de Tu gracia, no pecaré nuevamente. Amén
Padrenuestro...Avemaría... Gloria... (tres veces)
Señor nuestro Jesucristo agonizante. Tú sufriste y pagaste por nosotros... Que se haga Tu voluntad en la tierra.
Aplaca el fuego de Tu cólera, oh Señor... perdón porque hemos pecado... No pecaremos nunca más.
Jesús Sacramentado perdónanos, te rogamos, oh Señor.
ORACIÓN A LA SANTÍSIMA TRINIDAD
Oh Santísima Trinidad, Padre, Hijo y Espíritu Santo. Te ofrezco la Palabra hecha carne, Jesucristo, su carne cubierta de Heridas y Sangre, su agonía en el huerto, su flagelación, su coronación de espinas, el repudio que sufrió, su condena, su crucifixión y muerte, en unión con todos los sufrimientos de Tu Santa Iglesia y la sangre de los mártires, en reparación por mis pecados y los pecados del mundo entero. Amén
ORACIÓN AGONIZANTE
Jesús Agonizante, yo te ofrezco mi corazón para unirlo a Tu Corazón Agonizante y compartir Tu agonía. Jesús, yo deseo permanecer en agonía Contigo, a fin de apresurar Tu glorioso Reino de Paz. Amén
SÉPTIMO LLAMADO ANGUSTIOSO
"Hijo Mío, mira cómo tus pecados me han clavado en la Cruz. Estoy sangrando por amor a ti. Estoy sudando por amor a ti. Estoy sediento de amor por este mundo necesitado. Ninguno de ustedes desea consolarme... más bien me ofrecen vinagre para calmar Mi sed.
Todos ustedes se mantienen alejados, se burlan y Me critican. Hijo Mío, mira como hablas falsedades de tu prójimo. En vez de orar por Mi Santa Iglesia, continúan criticándola. Yo soy Jesucristo Agonizante, a quien ustedes critican. La Iglesia es Mi Cuerpo, al que están crucificando.
HIJO MÍO. PÁRATE AL PIE DE MI SANTA CRUZ, Y OFRÉCEME JUNTO CON MI MADRE, EL MUNDO ENTERO.
Yo lo aceptaré, y lo ofreceré a Mi Padre. Ellos serán Sus hijos, y obedecerán Sus mandatos. La ira del Padre Eterno se aplacará. Mis Santas Llagas serán sanadas. Entonces Mi reino vendrá sobre la tierra.
Hijo... has de crucificarte por Mí y Conmigo, en la Santa Cruz de la Salvación. Esto es lo que más necesito de ti, en reparación por tus pecados, y los pecados del mundo entero. Hijo, Yo no he pedido esto al mundo, sino a ti, porque Te amo, y deseo que me demuestres tu amor. Yo te prometo que atraeré a ti y a todos los hombres hacia Mí, a través de ti.
Acepta Mi llamado angustioso, oh amado hijo! Yo ofreceré todos tus sacrificios a Dios para que sean aceptables, en reparación por tus pecados y los del mundo entero.
Al final, el mundo entero vivirá en Mí, Conmigo, y para Mí. Mi Sagrado Costado se abrirá para ser el refugio de todos los hombres. Sacarán Agua Viva, de la Fuente de la Vida que brota de Mi Sagrado Costado. Hijo, que se haga Mi voluntad en la tierra. Que se haga Mi voluntad en ti. Sufre por Mí, y Conmigo. Muere por Mí, y vive en Mí.
Yo soy Jesucristo Agonizante, te amo. Yo los bendigo a todos".
(Silencio)
Oración
Dios mío. Dios mío... yo creo firmemente con todo mi corazón... espero y confío sinceramente en Ti. Solamente a Ti adoraré por siempre. Con verdadero arrepentimiento y amor, me postro a Tus Pies; te pido perdón por aquellos que no creen y no quieren creer, por aquellos que no Te adoran y no quieren adorarte y por aquellos que Te crucificaron y Te están crucificando diariamente. Querido Jesús, yo te consolaré durante toda mi vida. Amén.
Acto de Contrición
Oh mi Dios, yo me arrepiento de todo corazón por haber pecado contra Ti, por ser Tú tan bueno. Con la ayuda de Tu gracia, no pecaré nuevamente. Amén
Padrenuestro...Avemaría...
Gloria... (tres veces)
Señor nuestro Jesucristo agonizante. Tú sufriste y pagaste por nosotros... Que se haga Tu voluntad en la tierra.
Aplaca el fuego de Tu cólera, oh Señor... perdón porque hemos pecado... No pecaremos nunca más.
Jesús Sacramentado perdónanos, te rogamos, oh Señor.
ORACIÓN A LA SANTÍSIMA TRINIDAD
Oh Santísima Trinidad, Padre, Hijo y Espíritu Santo. Te ofrezco la Palabra hecha carne, Jesucristo, su carne cubierta de Heridas y Sangre, su agonía en el huerto, su flagelación, su coronación de espinas, el repudio que sufrió, su condena, su crucifixión y muerte, en unión con todos los sufrimientos de Tu Santa Iglesia y la sangre de los mártires, en reparación por mis pecados y los pecados del mundo entero. Amén
ORACIÓN AGONIZANTE
Jesús Agonizante, yo te ofrezco mi corazón para unirlo a Tu Corazón Agonizante y compartir Tu agonía. Jesús, yo deseo permanecer en agonía Contigo, a fin de apresurar Tu glorioso Reino de Paz. Amén
(Inclinando la cabeza)
Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo... (Siete veces)
Corona de Renovación1
(Bernabé Nwoye, vidente nigeriano)
La Coronilla se recita sobre
las cuentas de un Rosario
de Cinco Misterios.
7 de Junio de 2003
Mensaje de Nuestra Señora:
“Yo vengo a ofreceros, a vosotros y al
mundo entero, otro gran don de Manos del
Padre Eterno. Es un don de alegría para todos los
corazones que han recibido el Reino de Dios, y
también un don de verdadero arrepentimiento
para todos aquellos que lo reciban con esperanza.
Es el don de las Rosas del Reino Glorioso…
Recibidlo de Mí, pues benditas son las manos
de quienes lo recibirán. Esta Oración será usada
para dar la bienvenida a la Fiesta del Glorioso
Reino, a la Medianoche del 13 al 14 de
Septiembre; y para cerrar el día, hacia las 11:00
pm, del 14 de Septiembre, antes del beso de la
Cruz, a la Medianoche. La oración será cantada y ofrecida en adoración, con la de luz de 12 velas,
para recibir el Espíritu del Nuevo Pentecostés.”
¡Ven, Espíritu Santo! Llena los corazones de
Tus fieles.
Y enciende en ellos el Fuego de Tu
Amor.
V: Envía Tu Espíritu y ellos serán creados.
R: Y renovarás la faz de la Tierra.
Oremos:
¡Oh, Dios, que has instruido los corazones de
Tus fieles con la Luz del Espíritu Santo!
Concédenos, por el mismo Espíritu, la verdadera
Sabiduría y el gozo eterno de Sus Divinos
Consuelos. Te lo pedimos por Jesucristo, nuestro
Señor. Amén.
El Credo de los Apóstoles.* (En el Crucifijo)
Padre Nuestro y Ave María.* (Sobre la
primera cuenta)
Glorias. (Sobre 3 cuentas)
Cántico
¡Oh, Santísima Trinidad! Padre, Hijo y Espíritu Santo.
Santificado sea Tu Nombre. Venga Tu Reino.
Hágase Tu Voluntad en la Tierra como en el Cielo.
1º MISTERIO
El Plan del Padre Eterno de Redimir al
Mundo enviando a Su Hijo Unigénito.
(Pausa y Meditación)
Una voz gritó desde el Trono más alto diciendo: “¿A quién enviaré? ¿Quién irá y redimirá
al mundo y les hará descender Mi Reino?” En
ausencia de cualquier respuesta, Jesús, la Palabra
Eterna, dijo: “Aquí estoy, envíame a Mí, Padre.”
¡Oh, Dios! Por los méritos de este Misterio,
hazme un instrumento de salvación y renovación
para el mundo. Amén.
Padre Nuestro y Ave María.* (Sobre una
cuenta).
L: Ven, Espíritu Santo, ven a mi corazón y
llena los corazones de los fieles.
R: Y renueva la faz de la Tierra. (Se repite diez veces)
Gloria…*
Cántico
¡Oh, Santísima Trinidad!
Padre, Hijo y Espíritu Santo.
Santificado sea Tu Nombre.
Venga Tu Reino.
Hágase Tu Voluntad
en la Tierra como en el Cielo.
2º MISTERIO
Una Niña llamada María fue elegida para
ser
la Hija de Dios Padre,
la Madre de
Dios Hijo
y la Esposa de Dios Espíritu Santo.
(Pausa y Meditación)
Dios envió un Ángel a una jovencita llamada
María, en la ciudad de Nazaret en Galilea, a
anunciar el Nacimiento de Su Hijo Unigénito. Al
saludo del Ángel, el Espíritu Santo descendió
sobre Ella y Concibió del Espíritu Santo. Ella dio a
luz al Redentor del mundo.
¡Oh, Dios! Por los méritos de este Misterio,
dame la gracia de la pureza y la humildad, de
modo que por la humildad, yo aplaste la cabeza
de satanás y por la pureza, mi alma sea Tu
tabernáculo. Amén.
Padre Nuestro y Ave María.* (Sobre una
cuenta).
L: Ven, Espíritu Santo, ven a mi corazón y
llena los corazones de los fieles.
R: Y renueva la faz de la Tierra. (diez veces)
Gloria…*
Cántico
¡Oh, Santísima Trinidad!
Padre, Hijo y Espíritu Santo.
Santificado sea Tu Nombre.
Venga Tu Reino.
Hágase Tu Voluntad
en la Tierra como en el Cielo.
3º MISTERIO
Dios Revela a Su Hijo al Mundo.
(Pausa y Meditación)
Cuando llegó el tiempo, Dios reveló a Su Hijo
al mundo. Primero, en Su Bautismo en el río
Jordán, cuando Dios dijo: “Éste es Mi Hijo Amado,
en quien Me complazco.” (Mt 3:17). Y de nuevo,
durante la Transfiguración en el Montaje Tabor,
cuando Él añadió: “Escuchadle.” (Mt 17:5).
¡Oh, Dios! Por los Méritos de este Misterio,
dame la gracia de ser como Tú me creaste, para
que haga las cosas para las que Tú me creaste.
Amén.
Padre Nuestro y Ave María.* (Sobre una
cuenta).
L: Ven, Espíritu Santo, ven a mi corazón y
llena los corazones de los fieles.
R: Y renueva la faz de la Tierra. (diez veces)
Gloria…
Cántico
¡Oh, Santísima Trinidad!
Padre, Hijo y Espíritu Santo.
Santificado sea Tu Nombre.
Venga Tu Reino. Hágase
Tu Voluntad
en la Tierra como en el Cielo.
4º MISTERIO
Jesús Proclama el Reino de Dios en la Tierra.
(Pausa y Meditación)
Cuando llegó la hora exacta, después del
ayuno y de ser tentado por el diablo, Jesús se fue
a las ciudades del mundo y proclamó el Reino de
Dios diciendo: “¡Convertíos! El Reino de Dios está
al alcance de la mano.” Él pasó haciendo el bien y
llamando a los pecadores a volver a Dios.
¡Oh, Dios! Por los Méritos de este Misterio,
dame la gracia de proclamar Tu Reino en la Tierra,
con palabras y acciones, para que así Tu Reino
llegue pronto a los confines de la Tierra. Amén.
Padre Nuestro y Ave María.* (Sobre una
cuenta).
L: Ven, Espíritu Santo, ven a mi corazón y
llena los corazones de los fieles.
R: Y renueva la faz de la Tierra. ( diez veces)
Gloria…*
Cántico
¡Oh, Santísima Trinidad!
Padre, Hijo y Espíritu Santo.
Santificado sea Tu Nombre.
Venga Tu Reino.
Hágase Tu Voluntad
en la Tierra como en el Cielo.
5º MISTERIO
El Triunfo de La Cruz.
(Pausa y Meditación)
“Ya que el hombre fue derrotado en el árbol;
el hombre será redimido en el árbol; de modo
que el árbol de la caída del hombre sea el árbol
de la resurrección del hombre.” Y Él vino a Su
pueblo, pero Su pueblo no Lo recibió, más bien Lo
arrastraron a la montaña llamada Gólgota, donde
Lo clavaron en la Cruz. Sobre aquella Cruz, Cristo
anunció Su Triunfo diciendo: “Todo está cumplido.” (Juan 19:30).
¡Oh, Dios! Por los Méritos de este Misterio,
fortalece la fe de Tus pequeños en la Tierra. Que
ellos puedan unirse a Tu Iglesia para vencer al
dragón rojo, para la manifestación de Tu Glorioso
Reino. Amén.
Padre Nuestro y Ave María.* (Sobre una
cuenta).
L: Ven, Espíritu Santo, ven a mi corazón y
llena los corazones de los fieles.
R: Y renueva la faz de la Tierra. (diez veces)
Gloria…
Cántico
¡Oh, Santísima Trinidad!
Padre, Hijo y Espíritu Santo.
Santificado sea Tu Nombre.
Venga Tu Reino.
Hágase Tu Voluntad
en la Tierra como en el Cielo.
La Salve…
Las Rosas del Reino Glorioso siguen
con Las Letanías a los Santos y la Oración
de Consagración a la Preciosísima
Sangre de Jesucristo.
LETANÍAS DE LOS SANTOS
Señor, ten piedad de nosotros Señor, ten piedad de nosotros
Cristo, ten piedad de nosotros Cristo, ten piedad de nosotros.
Señor, ten piedad de nosotros. Señor, ten piedad de nosotros.
Cristo, óyenos. Cristo, escúchanos con bondad.
Dios, Padre Celestial. Ten piedad de nosotros.
Dios, Hijo Redentor del mundo. Ten piedad de…
Dios, Espíritu Santo. Ten piedad de nosotros.
Santísima Trinidad, Un Solo Dios. Ten piedad de…
Santa María. "ruega por nosotros"
Santa Madre de Dios.
Santa Virgen de las vírgenes.
San Miguel.
San Gabriel.
San Rafael.
Todos los Santos Ángeles y Arcángeles.
Todas las santas órdenes de los espíritus bienaventurados.
San Juan Bautista.
San José.
Todos los Santos Patriarcas y Profetas.
San Pedro.
San Pablo.
San Andrés.
San Juan.
Santo Tomás.
Santiago.
San Felipe.
San Bartolomé.
San Mateo.
San Simón.
San Tadeo.
San Matías.
San Bernabé.
San Lucas.
San Marcos.
Todos los Santos Apóstoles y Evangelistas.
Todos los Santos Discípulos del
Señor.
Todos los Santos Inocentes.
San Esteban.
San Lorenzo.
San Vicente.
San Fabián y San Sebastián.
San Juan y San Pablo.
San Cosme y San Damián.
San Gervasio y San Protasio.
Todos los Santos Mártires.
San Silvestre.
San Gregorio.
San Ambrosio.
San Agustín.
San Jerónimo.
San Martín.
San Nicolás.
Todos los Santos Obispos y Confesores.
Todos los Santos Doctores.
San Antonio.
San Benito.
San Bernardo.
Santo Domingo.
San Francisco.
Todos los Santos Sacerdotes y
Levitas.
Todos los Santos Monjes y Ermitaños.
Santa María Magdalena.
Santa Águeda.
Santa Lucía.
Santa Inés.
Santa Cecilia.
Santa Catalina.
Santa Anastasia.
Todas las Santas Vírgenes y Viudas.
Todos los Santos y Santas de Dios.
Intercedan por nosotros.
Se misericordioso
Escúchanos con bondad oh señor
De todo mal. libranos señor
De todo pecado.
De Tu Ira.
De la muerte súbita e imprevista.
De las asechanzas del demonio.
De la cólera, del odio y de toda
mala intención.
Del espíritu de fornicación.
Del rayo y de la tempestad.
Del azote de los terremotos.
De la peste, del hambre y de la
guerra.
De la muerte eterna.
Por el Misterio de Tu Santa Encarnación.
Por Tu Venida.
Por Tu Natividad.
Por Tu Bautismo y santo ayuno.
Por Tu Cruz y Tu Pasión.
Por Tu Muerte y Sepultura.
Por Tu Santa Resurrección.
Por Tu admirable Ascensión.
Por la Venida del Espíritu Santo, el
Consolador.
En el Día del Juicio.
Nosotros, que somos pecadores: Te rogamos escúchanos
Ten misericordia
Perdónanos
Acércanos al verdadero arrepentimiento
Que Te dignes regir y gobernar Tu
Santa Iglesia.
preserva nuestro prelado apostólico y todas las ordenes eclesiásticas en la santa religión
Que Te dignes abatir a los enemigos
de la Santa Iglesia.
Que Te dignes conceder a los reyes
y príncipes cristianos la paz y la
verdadera concordia.
Que Te dignes conceder la paz y la
unión a todo el pueblo cristiano.
Que Te dignes devolver a la unidad
de la Iglesia, a los que viven en el
error, y traer a la luz del Evangelio
a todos los infieles.
Que Te dignes fortalecernos y conservarnos en Tu Santo Servicio.
Que levantemos nuestro espíritu al
deseo de las cosas Celestiales.
Que concedas a todos nuestros
bienhechores la recompensa de los
bienes eternos.
Que libres nuestras almas, las de
nuestros hermanos, parientes y
bienhechores de la condenación
eterna.
Que Te dignes darnos y conservar
las cosechas de la Tierra.
Que Te dignes conceder el descanso eterno a todos los fieles
difuntos.
Que Te dignes escucharnos, Hijo de
Dios.
¡Cordero de Dios, que quitas los pecados del
mundo! ¡Perdónanos, Señor!
¡Cordero de Dios, que quitas los pecados del
mundo!
¡Escúchanos, Señor!
¡Cordero de Dios, que quitas los pecados del
mundo!
¡Ten Misericordia de nosotros!
Cristo, óyenos. Cristo, óyenos.
Cristo, escúchanos. Cristo, escúchanos.
Cristo, ten piedad de nosotros Cristo,ten piedad
de nosotros.
Señor, ten piedad de nosotros Señor, ten piedad
de nosotros.
CONSAGRACIÓN A LA PRECIOSÍSIMA
SANGRE DE JESUCRISTO
(Rezar diariamente meditando)
Consciente de mi nada y de Tu sublimidad,
Misericordioso Salvador, me postro a Tus Pies, y
Te agradezco por las innumerables pruebas de Tu
Gracia que Te has dignado derramar en tan
ingrata criatura.
En especial, Te doy gracias por haberme
liberado por Tu Preciosa Sangre del poder
destructivo de Satanás.
En presencia de mi querida Madre María, de
Mi Ángel Guardián, de Mis Santos Patronos y de
todas las Huestes Celestiales, me Consagro
voluntariamente y de todo corazón, ¡oh, querido
Jesús!, a Tu Preciosa Sangre con la que redimiste
al mundo del pecado, de la muerte y del infierno.
Te prometo, con la ayuda de Tu Gracia y con
todas mis fuerzas, suscitar y promover la
Devoción a Tu Preciosa Sangre, que es el Precio
de nuestra Redención, para que Tu adorable
Sangre sea honrada y glorificada por todos.
De esta forma quiero reparar mi deslealtad a
Tu Preciosa Sangre de Amor y ofrecerte
satisfacción por las muchas profanaciones que los
hombres cometen contra el inestimable precio de
su salvación.
Que mis propios pecados, mi frialdad y todos
los actos irrespetuosos que haya cometido en el
pasado contra Ti, ¡oh, Sangre Santa y Preciosa!,
queden borrados.
Mira, ¡oh, querido Jesús!, Te ofrezco el amor,
el honor y la adoración que Tu Santísima Madre,
Tus fieles discípulos y todos los Santos han
ofrecido a Tu Preciosa Sangre.
Te pido que olvides mi falta de fe y frialdad
en el pasado, y que perdones a todos los que Te
han ofendido.
¡Oh, Divino Salvador! Rocíame a mí, y a todos
los hombres, con Tu Preciosa Sangre, a fin de que
Te amemos, ¡oh, Amor Crucificado!, de ahora en
adelante, con todo nuestro corazón, y que
dignamente honremos el Precio de nuestra
Salvación. Amén.